A la hora de tomar decisiones importantes, como adquirir un automóvil, seleccionar una televisión o buscar un pediatra para nuestros hijos, nos encontramos ante una encrucijada: ¿optar por lo original pero desconocido, o decantarnos por lo tradicional y confiable? Si bien las preferencias varían según cada individuo, es plausible anticipar que cuando nos enfrentamos a elecciones que acarrean un gasto significativo y carecemos de información suficiente, tendemos a inclinarnos por la seguridad en lugar de la novedad.
La Confianza y tu marca Personal
Cada día estoy más convencida de que el valor intrínseco de la marca personal, marca comercial o marca empresarial, radica en la confianza que puede inspirar y en la sensación de seguridad que brinda lo familiar. El concepto de “branding” a menudo se malinterpreta. Muchos asocian una marca fuerte con adjetivos como “crack”, “cool” o “divertida a más no poder”. Sin embargo, las marcas que perduran en el tiempo son aquellas que han demostrado consistencia, confiabilidad y altos estándares de calidad a lo largo de su trayectoria.
Sembrar, Crecer y mantenerse
Es relevante mencionar esto porque parece que, para destacar en el ámbito laboral o incluso en las redes sociales, se espera innovar de manera constante. A mi parecer, el verdadero enfoque radica en un trabajo constante, en sembrar con paciencia y en ejecutar las tareas con excelencia, evitando errores graves. Si bien un acto extravagante puede otorgarnos un breve momento de notoriedad, esto no nos transforma automáticamente en una auténtica marca. Una marca, ya sea personal o comercial, es una impronta que puede quedar plasmada en la orilla de una playa o dejar su huella en Hollywood.
Lamentablemente, vivimos en un mundo donde la efímera impresión se valora más que la duradera influencia. Esto se manifiesta claramente en la esfera política. No obstante, una Marca Personal existe con el propósito de que su portador sea recordado como alguien en quien se puede confiar. Si eres un profesional en búsqueda de empleo, tu objetivo primordial debe ser establecerte como alguien fiable. Si bien es legítimo desear demostrar originalidad y singularidad, esto debe ser realizado a través de la consolidación de tu credibilidad y la presentación de pruebas concretas que respalden tus habilidades superiores, tu precisión y tu astucia.
En última instancia, la Marca Personal que construyas será la que defina tu legado. La felicidad personal y la satisfacción provienen no solo de destacar momentáneamente, sino de perdurar en la memoria de otros como una elección confiable y valiosa. En este sentido, la mejor opción consiste en fusionar la originalidad con la confiabilidad, trabajando día a día para cimentar una presencia que no solo impacte, sino que también perdure en el tiempo.